Acabamos de enterarnos. José Luis Alcalde, ha muerto. Ha sido en León, en la residencia de la comunidad de dominicos de la Virgen del Camino. No era muy mayor. Había nacido en 1940, por lo que hoy, a los 78 años todavía es una edad bastante normal. Durante 20 años fue profesor de Religión en el IES Domínguez Ortiz de Vallecas. Allí llegó a ser toda una institución. El respeto de compañeros y alumnos se lo había ganado a pulso. Se dice que era un “tío con encanto”. Su naturalidad y simpatía, a la que hay que añadir su creatividad y su imaginación, le hacían un compañero cercano y un profe con tirón, no falto de sentido del humor. No descuidaba la temática específica del curriculum de religión, aunque sabía aplicarla a la realidad social de un barrio peculiar como Vallecas. Pertenecía a la comunidad dominicana de San Alberto Magno que atendía a la Parroquia de Santo Tomás de Villanueva. De esta manera, Instituto y Parroquia, eran para José Luis el mismo territorio de evangelización. Sin embargo, su mirada no se quedaba en el barrio madrileño; en el horizonte de su ministerio, estaba la otra orilla del atlántico. En varias ocasiones, me pidió gestionar en la administración educativa, unos meses de excedencia para visitar Cuba, donde la labor apostólica era para él apasionante. En definitiva, se nos ido a la casa del Padre un buen profesor, un buen compañero, un buen sacerdote, un buen amigo. Que el Señor, en su misericordia, le haya acogido en su seno.
Pepe Blanco.