eTwinning. ¿Has escuchado alguna vez esta palabra? De primeras puede parecer que es un anglicismo más, pero os puedo garantizar que es mucho más que eso, es una oportunidad, un medio para enriquecer nuestra labor docente y hacer partícipes a nuestros alumnos de un gran proyecto colaborativo. Os explico con detalle.
eTwinning es la mayor comunidad de centros escolares de Europa, de la que participan: profesores de todas las asignaturas, directores, bibliotecarios, jefes de estudios, con el fin de comunicarse, colaborar y desarrollar proyectos cooperativos, llegando a ser la comunidad educativa más atractiva de Europa.
Mi experiencia con eTwinning comenzó hace poco más de un año, en el curso escolar 2017 – 2018, en el IES VALMAYOR, donde soy profesora de religión, después de la evaluación inicial mis alumnos de 3º de la ESO se mostraban desmotivados y constantemente se quejaban por sus bajo rendimiento académico en las diferentes asignaturas. Comencé entonces a buscar algo que los motivara y les ayudara a reconocer su valía. Entonces encontré el eTwinning; un mundo de posibilidades, pero surgía la primera limitación, ni mis alumnos ni yo dominamos el inglés, lengua vehicular de casi todos los proyectos, finalmente gracias a la misma plataforma pude coordinar con profesoras de Italia, Dublín, Alemania y Francia la realización de un proyecto sobre la vida y los sueños de nuestros alumnos utilizando como lengua del proyecto el castellano.
El proyecto se desarrolló a lo largo del curso escolar, los alumnos y alumnas se presentaron, se conocieron y hablaron sobre las cosas que les inquietaban, hicieron vídeos sobre sus institutos y el calendario escolar y de vacaciones, llevaron a cabo la construcción conjunta de una casa, siendo la casa de sus sueños. En fin logramos el contacto con chicos de la misma edad que se interesaron por conocerse, al igual que las profesoras participantes, todo en un entorno digital seguro denominado twinspace y empleando diversas herramientas digitales. Todos aprendemos de todos con contenidos que se integran fácilmente en el currículo escolar.
Finalmente, nuestro proyecto obtuvo el Sello Nacional y Europeo por cumplir con los estándares nacionales y europeos. Pero mi mayor premio ha sido conocer 4 profesoras maravillosas que me han enseñado mucho y ver en mis alumnos que más allá de lo intelectual, han sido responsables, respetuosos, colaboradores y competentes. Además del reconocimiento de mis compañeros de claustro y equipo directivo por llevar a cabo esta iniciativa desde la asignatura de religión.
Liliany Escorcia T.
Profesora de Religión